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El par AUD/USD está insinuando una ruptura antes del fin de semana, pero si puede mantener las ganancias de ruptura (si llegan) puede depender de la reunión del RBA de la próxima semana y del informe de inflación de EE. UU.

Los futuros de Nikkei parecen un mercado en el que los alcistas y los bajistas están en guerra, mientras el precio continúa enroscándose dentro de un triángulo simétrico, esperando una posible ruptura explosiva.

Momentos después de que mi colega David Scutt advirtiera sobre otra ronda de desmantelamiento de las operaciones de carry trade, el BOJ emitió una nueva ronda de comentarios agresivos. Los rendimientos estadounidenses también estaban bajo presión tras el debate Harris-Trump, que era el escenario ideal para enviar el USD/JPY por debajo de 141 por primera vez desde enero.

Las clases de activos más riesgosas han tenido un buen desempeño a la espera de los informes del IPC de EE. UU. en los últimos tiempos. En el caso de los futuros del AUD/USD y del ASX 200 SPI de Australia, un entorno así debería ser ventajoso para las ganancias a corto plazo.

El EUR/USD ha logrado recuperar parte de las pérdidas de la semana pasada, a medida que se acerca el informe de empleo no agrícola del viernes. Pero para que tenga alguna posibilidad de alcanzar un nuevo máximo hasta la fecha, es probable que el IPC estadounidense deba seguir debilitándose y que el BCE sorprenda con un recorte moderado menos de lo esperado el jueves.

Si bien los menores costos de endeudamiento y un dólar estadounidense más débil normalmente impulsarían el precio del oro, en el corto plazo, los recortes de tasas, ya sean grandes o pequeños, pueden resultar en una crisis para los optimistas sobre el oro.

Si el nivel 144,00 cede, el par USD/JPY podría continuar hacia el mínimo de 13 meses en torno a 140,75.

El oro, la plata y el cobre cayeron el martes debido al apetito por el riesgo, aunque podrían ser los dos últimos los que muestren un mayor potencial para los bajistas en el futuro.

Las esperanzas de que la temporada de conducción en Estados Unidos impulsara los precios a nuevos máximos para 2024 este verano no se materializaron, ya que la demanda siguió siendo débil en regiones económicas clave como China. Al mismo tiempo, la OPEP+ parecía contenta con los planes de aumentar la producción a partir del cuarto trimestre.